domingo, 5 de marzo de 2006

El tiempo de Cuaresma


Toda esta vida es un camino
para un caminante sin vida.

Peregrinar por el cuerpo
para llegar al alma,
es darle amor a uno mismo.

Peregrinar por el alma
para llegar al cuerpo,
es donarle amor a los demás.

No hay valles oscuros,
sino miradas tristes.
No hay mundos en guerra,
sino guerra de mundos.

La pobreza más grande
es no conocer el verso
que nos lleva a Dios
y no reconocer la cruz
como flor de esperanza.

Para un caminante sin vida,
toda esta vida es un camino
que sólo tiene sentido
si la gratuidad es norma
y la ingenuidad corazón.


Víctor Corcoba Herrero
corcoba@telefonica.net